El gran mercadeo de los refugiados

Incapaz de encontrar una solución en su propio seno, la Unión Europea negoció con Turquía la forma de deshacerse de los refugiados. El acuerdo al que llegaron establece las modalidades para parar el flujo de refugiados con dirección a Europa.

Los nuevos refugiados que lleguen desde Turquía a las Islas Griegas, serán devueltos a Turquía. Según Angela Merkel, el acuerdo pondrá fin al tráfico de seres humanos. Será todo, menos seguro que eso ocurra.

La Unión Europea da la impresión de querer renunciar a sus principios, al ideal europeo de humanismo y solidaridad. El mercadeo de seres humanos desesperados, huyendo de la guerra, las violaciones y el hambre, tiene algo de cínico y nos hace pensar en los momentos más vergonzosos de la Historia de la humanidad, la esclavitud y los genocidios.

Confrontada a la llegada incesante y masiva de refugiados, la Unión Europea, tenía que encontrar una solución y vista su posición geográfica, Turquía parece el país ideal para ejercer de dique de contención a los flujos de refugiados.

La firma de ese acuerdo otorga a Turquía beneficios económicos y sobretodo políticos. El autoritario Gobierno turco, islamoconservador, muy criticado en Europa, utilizará este acuerdo para lavarse la cara y acercar posturas con la UE.

No sería una mala idea instalar los refugiados Sirios en Turquía, en la perspectiva de un regreso a sus casas una vez terminada la guerra. Las condiciones deberían ser mejores que en los campos de Líbano o Jordania, pero la distancia relativamente corta entre los dos países, hace que el regreso a Siria parezca muy lejana  en razón del dramático estado en el que se encuentra su país.

Este acuerdo calmará la opinión pública de los extremistas de derecha europeos pero no eliminará el flujo de refugiados y, una buena parte de los 6000 millones de Euros alguien duda que no sirva para alimentar… la corrupción turca?.

Los desesperados, encabezados por afganos e iraquíes, continuarán huyendo hacia Europa, tomando caminos más peligrosos y más caros, beneficiando a los infames traficantes de seres humanos.

Europa pisotea los derechos Humanos, vende su alma al diablo, renuncia a sus principios y con 6000 millones de Euros quiere comprarse una buena conciencia…